Hace tan solo dos semanas disfrutamos en familia de una escapada a la zona de Muntanyes de Prades en Tarragona. No conocíamos este destino y como ya es habitual en nuestras últimas escapadas a Cataluña, nos sorprendió mucho por su amabilidad a la hora de visitarla con niños. ¡Todo un acierto visitar Muntanyes de Prades con niños!
En concreto, visitamos la zona de la comarca de la Conca de Barberá que se encuentra en estas Montañas. Este destino fue el segundo destino de interior que en 2014 obtuvo el sello de Destino de Turismo Familiar por parte de la Agencia Catalana de Turismo.
La zona que disfruta de esta certificación familiar comprende los municipios de Alcover, Arbolí, L’Espluga de Francolí, LaFebró, Capafonts, Mont-ral, Vallclara, Vilanova de Prades, Vilaverd, Vimbodí i Poblet y Prades. En ella , podréis encontrar el Paraje Natural de Interés Nacional de Poblet, y la sierra de las montañas de Prades (geniales por cierto para hacer rutas con niños).
Se trata de una zona preciosa, tranquila, con un montón de recursos para disfrutar en familia y unos municipios muy fáciles de manejar y de descubrir con los niños. Podéis encontrar una gran diversidad de rutas con niños (varios senderos de gran recorrido la atraviesan), la famosa Ruta del Cister que une naturaleza y patrimonio, actividades en bici o a caballo, etc. Además, su localización es magnífica, muy próxima a la Costa Dorada (Port Aventura está a unos 45 minutos) y de muy fácil acceso en AVE, ya que la estación de Camp de Tarragona está también a unos 45 minutos aproximadamente en coche).
Nuestra escapada fue de fin de semana, por lo que os aseguro nos quedamos con ganas de mucho más. Pero por aquí os dejo, 5 planes que podéis poner en práctica si os decidís a visitar la zona con niños. ¡Espero que os gusten!
5 planes para visitar Muntanyes de Prades con niños
1- Museo de la Vida Rural, en L’espluga de Francolí
Inmenso y tranquilo museo para visitar con niños. Se trata de un espacio destinado a mostrar la forma de vida tradicional en la zona rural de Cataluña: de los payeses (campesinos catalanes) y de sus costumbres. Como elemento vertebrador de esa vida tradicional, se muestra la agricultura, en torno a la cual, otras actividades diversificaban la economía local, tales como los oficios tradicionales (maestro, pastelero, hilandera, boticario, barbero, cestero, etc) o el arte y sin olvidar la cultura propia del territorio.
El Museo no solo muestra herramientas y utensilios, sino que es un magnífico escenario de las diferentes labores agrícolas, los diversos oficios y las costumbres en el hogar dentro del contexto temporal en el que se encuentran. A través de todo el recorrido se pone de relevancia los valores de sostenibilidad, respeto al entorno y alimentación saludable, protagonistas indiscutibles de todo el itinerario.
La visita se estructura en diversos edificios unidos a través de un patio-jardín. Una proyección inicial da comienzo a la visita, para luego descubrir una colección inmensa de esculturas que representan la vida en las zonas rurales, herramientas y utensilios, las diferentes etapas en la vida agrícola, descripción de los oficios, etc. ¡Interesante para visitarlo con niños!
2- Geocaching en los alrededores del Monasterio de Poblet
Para mí, una de las actividades más divertidas de todo el fin de semana. Nunca habíamos probado el geocaching y teníamos unas ganas tremendas, así que fue la ocasión ideal. Nosotros hicimos la actividad en compañía de Drac Actiu, empresa de turismo activo y actividades medioambientales que nos enganchó desde el momento inicial. Además, la guía Chantal, ¡¡toda una crack con los niños!!. ¡Lo pasaron bomba! (bueno, y nosotros también). La ruta transcurrió entre los viñedos del entorno del Monaterio de Santa María de Poblet, de bellísimo paisaje, y orografía plana totalmente adecuada para hacerla con niños.
La actividad consistía en identificar a lo largo del camino unos pequeños «tesoros» escondidos, conveniente georeferenciados y que nos ayudaban a conocer un poco mejor el entorno. Cada uno de los peques llevaba colgado un GPS que le marcaba la ruta y le indicaba donde se encontraba cada tesoro. Es super curioso ver como la gamificación de la ruta a través de la búsqueda de los «tesoros» hace que los niños sean capaces de andar sin cansarse, motivados por la idea de encontrar cuanto antes el próximo tesoro. ¡Hubiesen andado hasta el fin del mundo!
Nos encantó, pronto repetiremos seguro.
3- Una visita guiada al Real Monasterio de Santa María de Poblet
Visitar la zona y no acercarse a descubrir el Monasterio de Santa María de Poblet es un pecado capital. El Real Monasterio es una abadía cisterciense que alcanzó su máximo esplendor en el s. XIV, y que ha sido declarado recientemente como Patrimonio de la Humanidad de la Unesco.
En la actualidad, sigue estando habitado por monjes del Císter que lo cuidan, mantienen una pequeña huerta y una hospedería para aquellos hombres que busquen retiro espiritual. Si hacéis la visita guiada, veréis que hay algunas dependencias que están en uso y a las que en algunos casos no se puede acceder.
La visita a su interior es impresionante, su claustro es una auténtica maravilla y resulta muy curioso para descubrirlo con los niños.
Además, el Monasterio está incluido en la llamada Ruta del Císter, ruta que transcurre por los tres Monasterios Reales que encontraréis en la zona: el Monasterio de Santes Creus, Poblet, y Vallbona de les Monges. Una ruta por tres auténticas joyas históricas, patrimoniales, y arquitectónicas.
4- Las cuevas de L’Espluga de Francolí
Si queréis retroceder en el tiempo y conocer más sobre la época del Paleolítico y Neolítico, hasta llegar a la Edad de Bronce, es una actividad imprescindible. Se trata de una serie de cavidades que transcurren por debajo de la localidad de L’Espluga y que la convierten en la séptima cueva más larga del mundo.
A modo de curiosidad, el nombre del municipio ya indica claramente lo que podéis encontrar en él: Espluga en latín significa cueva. La cueva está estructurada en dos cavidades diferenciadas: la cueva de la Vila y la Cueva de la Font Mayor. Por ellas además, transcurre un río que sale al exterior en la Font Major, y que constituye el nacimiento del río Francolí. Y con el, ya tenéis el nombre completo del municipio.
Totalmente recomendable para ir en familia.
Foto: Agencia Catalana de Turismo
5- Descubrir los pueblos de la zona
Nosotros pudimos conocer solo dos: L’Espluga de Francolí y Vimbodi i Poblet (un fin de semana no da para mucho más), pero como otras muchas zonas rurales, la mayor parte de su encanto se encuentra en conocer sus municipios, pasear tranquilamente por ellos, pararse en un parque un rato a jugar, tomarse un refresco en alguna terraza y en definitiva descubrirlos con pausa. Aún así, nos dio tiempo a visitar alguna bodega que otra (la comarca es una región vitivinícola por excelencia) y descubrir sus callejuelas.
6- Festival Vitrum del vidrio en Vimbodí i Poblet
Nuestra visita coincidió con el Festival Vitrum en Vimbodi i Poblet. Y nos llamó tanto la atención que pasamos toda una mañana en él. Festival en torno al vidrio, a su artesanía y tradición, todo el pueblo, y prácticamente toda la comarca se vuelca en él. Se trata de una celebración local que se lleva celebrando en la zona desde el año 2014, y en la que encontraréis un magnífico programa de actividades para los niños: juegos, talleres, etc.
Festival Vitrum
En mi opinión, lo que más nos gustó fue la demostración en vivo en el Museo del Vidrio de la localidad por parte de un artesano del vidrio, de como se soplaba el vidrio. Durante la mayor parte de la mañana, el artesano estaba trabajando allí en el Museo, construyendo todo tipo de piezas (en especial porrones que era la figura estrella del festival). Los peques y nosotros alucinamos viendo soplar el video, como el cristal adoptaba el color rojo brillante y era moldeado por las herramientas del artesano, hasta conseguir las formas que deseaba. ¡Fue una pasada!
Básicamente estos fueron nuestros plans para el fin de semana. ¡Espero que os hayan gustado!
DONDE ALOJARSE EN MUNTANYES DE PRADES
- HOTEL SERCOTEL VILLA ENGRÀCIA. Ubicado en L’Espluga de Francolí, se trata de un complejo de habitaciones de hotel y apartamentos en el que encontraréis todo lo necesario para ir en familia. En verano, además, organizan unos macro campamentos para niños que tienen muy buena pinta. Tiene también un magnífico restaurante con menus infantiles y comida riquísima.
- MASÍA SAGUÉS. Si queréis alojaros en una Masía auténtica, cuidada con un cariño máximo, y en un entorno increíble, éste es vuestro lugar. La Masía está compuesta por una serie de apartamentos (nosotros estuvimos en uno con capacidad para 4 personas), en la que os sentiréis como en casa. Restaurante también espectacular.
DÓNDE COMER EN MUNTANYES DE PRADES
La gastronomía de la zona es exquisita. Realmente, todos los restaurantes que visitamos fueron magníficos y con una atención genial para los peques. Todos disponían de menús y de menús infantiles si así lo querías, y en todos ellos nos ofrecieron algún tipo de recurso para los niños: manteles que se coloreaban, lapiceros y estuches para pintar, pasatiempos… todos nos aportaron ese detalle extra que hicieron que los peques acabaran encantados y que todo en definitiva, sea mucho más fácil.
Manteles con Pasatiempos. Restaurante Font del Ferro
A modo de referencia, los restaurantes en los que estuvimos fueron:
- Restaurante Font del Ferro (L’Espluga de Francoli). Restaurante del Hotel Villa Engracia, de trato exquisita y comida magnífica.
Entrantes con lápices de colores. Restaurante Font del Ferro
- Restaurante Les Disset Fonts (L’Espluga de Francolí). Menús para adultos y niños, genial.
- Restaurante Bossería en el Monasterio de Poblet (Vimbodi i Poblet). Enfrente del mismo Monasterio es un lujo disfrutar de este lugar y su jardín. Mientras termináis, los peques pueden jugar en el jardín que hay al lado del restaurante.
Vistas al jardín del Restaurante Bosseria. Monasterio de Poblet.
- Restaurante Masía Sagués. Comida tradicional tan cuidada como el resto de detalles de la Masía.
Restaurante Masia Sagués. Muntanyes de Prades
¡Qué disfrutéis mucho vuestra estancia en Muntanyes de Prades con niños!