8 ideas para disfrutar de Cantabria con niños

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Ya para rematar la historia de nuestra escapada a Cantabria con niños realizada hace bien poquito, hoy me atrevo a haceros algunas sugerencias de espectaculares actividades en caso que decidáis visitar esta bonita zona.

En este post podéis encontrar los puntos clave de nuestro viaje de 5 días a Cantabria, pero me gustaría daros algunos detalles más de cada una de las ideas, para que lo disfrutéis al máximo posible. Cantabria es un destino estupendo para visitar en familia, con una gran cantidad de recursos que los peques disfrutarán al máximo y un paisaje que te dejará deslumbrado nada más llegar.

A continuación os dejo, algunas ideas para disfrutar de Cantabria con niños, todas vividas en primera persona. Hay millones de sugerencias más, y yo espero que me las contéis y por supuesto, volver pronto para vivirlas.

1-  PASEO EN PEDREÑERA POR LA BAHÍA DE SANTANDER.

¿Y qué es una Pedreñera? Se trata de la embarcación que recorre la bahía de Santander y hace el trayecto Santander-Pedreña, con parada en Somo. Es un recorrido magnífico para llegar hasta Santander y por supuesto, si vas con peques, lo disfrutarán mucho más que si haces el itinerario en coche por ejemplo.

Pedreñera

Esperando la Pedreñera

La llegada a Santander me encantó, las vistas de la ciudad son preciosas, y por supuesto, no hay que obviar la parte de «aventura» que tiene para los peques el esperar su llegada, montarse y atravesar la bahía en su cubierta. En la actualidad hay dos compañías que hacen el trayecto, siendo la más famosa la de Los Reginas. Además de este itinerario, también realizan un recorrido turístico por toda la bahía de 1 h aproximadamente (La Magdalena-Isla Mouro-Sardinero-Cabo Mayor-Mar Cantábrico-Isla Jorganes-Playas de Laredo- Somo y El Puntal). Los precios varían en función del recorrido. Muy recomendable para hacer con los peques y además supone un punto de vista diferente para aproximarse a Santander.

Santander desde la Pedreñera

Santander desde la Pedreñera

2- PASEO TRANQUILO POR EL PUERTO Y POR SANTANDER.

Nuestra llegada a Santander nos cautivó sin duda. Bellos edificios; bellas vistas; los remeros en acción; el descubrimiento de los Raqueros (personajes típicos santanderinos que acostumbraban a bucear en la bahía y lanzarse al agua para recoger las monedas que los curiosos le lanzaban); el extraño y cautivador Palacio de Festivales que aparecía cual león panza arriba en medio de nuestro paseo; el puerto que parecía sacado de un cuadro; o las preciosas vistas del mar. Un paseo sin prisa se hace imprescindible a la llegada a Santander.

raqueros_copia

puerto_Copia

3- VISITA AL MUSEO MARÍTIMO DEL CANTÁBRICO.

En Santander. Este museo nos resultó muy amable y apto para los peques, tanto por sus dimensiones como por su contenido en sí.

Museo Cantábrico

Ubicado en la orilla de la bahía de Santander, es un lugar con más de 3.000 m3 de acuarios situado en la planta semisótano donde los peques y mayores podemos disfrutar de  la fauna submarina. La entrada al mismo ya es espectacular puesto que en el hall central del edificio se puede disfrutar del esqueleto de una ballena colgado de la parte superior del edificio. Está organizado en tres plantas, un semisótano con los acuarios, una planta baja con el acceso y el hall central, junto al que se puede visitar una exposición de piezas marinas (aquí es donde podréis ver el calamar gigante pescado en la costa de Cantabria, en Pechón), y una primera planta donde se ubican exposiciones.

Museo Cantábrico

A lo largo del recorrido por los diferentes acuarios, no os perdéis perder el momento en que le dan de comer a los tiburones y demás peces del acuario mayor. Los peques alucinaron. Un buzo se introduce en el acuario con un bidón lleno de alimento y es genial ver como los peces (incluidos los tiburones) van a comer de su mano. ¡Muy chulo!

4- SUBIDA A LA CUEVA DE COVALANAS.

La Cueva de Covalanas está ubicada en Ramales de la Victoria, a unos 45 minutos en coche de Santander. Para llegar hasta ella hay que hacer una breve caminata (eso sí montaña arriba) de unos 15 minutos aproximadamente.

Subida a Cueva de Covalanas

El paseo no se hace pesado, porque además las vistas que se van disfrutando son geniales. La entrada se adquiere en la taquilla ubicada un poco antes del acceso a la cueva, y se realizan visitas guiadas. Esta cueva también es conocida como la cueva de las ciervas rojas, debido a que se pueden observar en une stado magnífico de conservación estas figuras en ella.

Entrada a la Cueva de Covalanas

Entrada a la Cueva de Covalanas

La cueva es de pequeñas dimensiones y tras entrar en ella vas recorriendo una especie de galería (estrecha) que te permiten ver de cerca las figuras. Además, la visita se realiza sin iluminación, tan solo con la luz de una pequeña linterna, lo que te ayuda a imaginarte aún más como se ubicarían en la cueva sus visitantes. Según nos contaron, no parece que la cueva estuviese habitada sino que sería un lugar de culto, o de protección. La experiencia fue genial y a los peques les encantó. Además, la guía la realizaba de forma muy amena, manteniéndonos enganchados a la historia a grandes y pequeños durante toda la visita. Si vais por la zona os recomiendo que no os la perdáis. Los menores de 4 años, entran gratis.

Bajada desde la Cueva de Covalanas

Bajada desde la Cueva de Covalanas

Un secreto: al bajar de la cueva justo tras pasar un giro del camino hacia la izquierda (ver arriba en la foto) hay un lugar al que asomarse y gritar muuuuyyyyy fuerte. El eco os responderá y a los peques les encantará. ¡Gran consejo de nuestra guía de Covalanas! ¡Genial!

5- SUBIDA AL TELEFÉRICO DE FUENTE DÉ.

Genial experiencia con mayúscula. Una auténtica aventura para los peques y en nuestro caso además, con el aliciente de que pudimos disfrutar de un ratito de nieve (que nosotros no estamos acostumbrados y lo agradecemos mucho). Sin duda, es uno de los imprescindibles, y si vais a Liébana ni os lo penséis.

Subida a Fuente Dé

6- RUTA A CABALLO EN ALGUNO DE SUS ESPECTACULARES PAISAJES.

Nosotros disfrutamos una de las tardes de un magnífico paseo a caballo en Liébana. Además fue especial ya que se trataba de la primera vez que el peque se montaba a caballo «solo». La actividad la hicimos con el Centro Ecuestre Aravalle, y fue muy divertida. Es una forma diferente de disfrutar los paisajes lebaniegos y que los niños disfrutan mucho.

Centro Ecuestre Aravalle

Centro Ecuestre Aravalle

7- VISITA AL MONASTERIO DE SANTO TORIBIO.

Este Monasterio, incluido como parada en el Camino de Santiago Lebaniego, está ubicado muy cerca de Potes (a unos 2 km al sur), y es otra de las joyas que no os podéis perder. Tuvimos la suerte de ser atendidos por uno de los monjes, que nos contó la historia del Lignum Crucis, reliquia que según se cree, debió pertenecer al brazo izquierdo de la Cruz de Cristo y que llegó al Monasterio alrededor del siglo VIII. La reliquia se encuentra incrustada en una cruz procesional de plata, tan solo con una parte pequeña accesible a los visitantes. Es emocionante escuchar la historia de boca del monje y como no, ver la reliquia.

Reliquia Santo Toribio

Además, desde el s XVI se celebra el Año Jubilar, durante el cual se abre la Puerta del Perdón, objeto de peregrinación para todos aquellos que quieren obtener el Jubileo. A nosotros, nos pareció un lugar lleno de paz y de magia, y sobre todo me impresionó la cercanía, alegría y fuerza que emanaba el monje que nos acompañó en la visita. Fue una experiencia muy especial.

Puerta del Perdón

Puerta del Perdón

Alrededor del Monasterio se encuentra 7 ermitas a las que se pueden llegar andando a través de sendas rutas para disfrutar del entorno. Nosotros nos acercamos hasta la Ermita de San Miguel, desde donde las vistas de los Picos de Europa son magníficas. Por cierto, una cosa que me llamó mucho la atención es que el Camino de Santiago Lebaniego tiene ciertos tramos en los que puedes disponer de wifi. En la actualidad solo son varios trayectos pero en el futuro quieren que esté todo cubierto. ¡Es genial!

Vistas desde Ermita San Miguel

Vistas desde Ermita San Miguel

8- VISITA AL PARQUE DE LA NATURALEZA DE CABÁRCENO.

Otra de las visitas estrella de esta escapada. Hicimos una variante a la visita habitual al parque, que es la llamada Visita Salvaje, con la que recorres con personal del Parque un itinerario determinado mientras te descubren muchos de los secretos y del funcionamiento de las instalaciones así como interaccionas en muchas ocasiones directamente con los animales, lo cual es una pasada para los peques (y para los mayores). Muy recomendable si vais con niños, porque alucinarán con los osos, gorilas o dándole zanahorias a las jirafas. Es genial.

Visita Salvaje Parque de la Naturaleza de Cabarceno

Visita Salvaje Parque de la Naturaleza de Cabarceno

Espero que disfrutéis mucho de Cantabria. Tanto como lo hicimos nosotros. Nos hemos quedado con muy buen sabor de boca y sin duda, volveremos pronto :).

¿Os animáis a visitar Cantabria con niños?
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Hay 4 comentarios

  1. Escrito por Nuria Granada Family el 16 julio, 2015

    Gracias por las recomendaciones!! Son estupendas y nos van a ayudar mucho a planificar nuestra visita. En agosto estamos en Cantabria!!!
    Un beso
    Nuria
    http://www.granadafamily.com

    • Escrito por Bienvenidos a Lilliput el 1 agosto, 2015

      ¡Qué bien! Me alegro mucho que te hayan gustado. Espero que os lo paséis bomba en Cantabria y por supuesto, que nos cuentes luego todas vuestras aventuras y todos los sitios que descubráis….¡que nosotros tenemos que volver pronto! Un saludo y gracias por pasar por aquí 🙂

  2. Escrito por Catalina de mamatambiensabe el 6 agosto, 2015

    Pues muy oportuno! Estoy justamente planificando los días que estaremos en Cantabria antes de ir a Asturias. Mi hermana me había recomendado ya lo del Parque, y tengo una duda… En un foro decían que en verano es muy lleno y desordenado, ¿a ti que te pareció?

    Un saludo, guapa.. Comparto.

    • Escrito por Bienvenidos a Lilliput el 9 agosto, 2015

      Nosotros fuimos a principios de Junio, por lo que imagino que la vorágine del verano aún no habría llegado. En general, había bastante gente pero no lo vimos masificado ni mucho menos. Comimos tranquilos en el restaurante del Parque y en todo momento estuvimos bien. Aunque nosotros hicimos la visita salvaje con la que en realidad, llevas itinerario propio. Nos encantó el lugar y lo recomiendo sin dudarlo. Si vas ahora en AGosto, cuéntame cómo os va, vale? para tener también alguna referencia de la época de verano 🙂 Un saludo y muy buen viaje! 🙂

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