Un paseo con niños por La Ciudad Encantada (Cuenca)

Este verano hemos tenido la suerte de visitar La Ciudad Encantada, en Cuenca.

Y digo la suerte, porque no os podéis ni imaginar como disfrutamos y lo bien que se lo pasaron los lilliputienses en esta jornada. Superó con creces nuestras expectativas.

La Ciudad Encantada, está ubicada en pleno Parque Natural de la Serranía de Cuenca, en la localidad de Valdecabras, a unos 30 minutos de la ciudad de Cuenca en coche. Se trata de un lugar espectacular, declarado Sitio Natural de Interés Nacional desde 1929 y en el que se puede disfrutar del fenómeno geológico del karst en su máxima expresión. Originado hace 90 millones de años, cuando tras la retirada del mar, el fondo marino quedó en la superficie y expuesto a miles de años de acción del viento y del agua.

El lugar puede ser recorrido a través de un itinerario perfectamente señalizado con dos tipos de indicaciones de diferentes colores (para la ida y para la vuelta). Son unos 2,5 km de recorrido aproximadamente. Con los peques se hace muy bien, es un recorrido fácil. Con carrito de bebé podría hacerse aunque en ciertas partes hay pequeñas escaleras en las que deberíais cargarlo a cuestas. Como siempre, si tenéis opción, mejor la mochila porta bebés.

Nuestros peques de 6 y 4 años hicieron andando todo el recorrido (bueno, la pequeñita se subió a hombros algún tramo). El recorrido está estimado en una duración de 1,5 h aproximadamente pero nosotros lo hicimos en… ¡unas 3 horas! aunque os aseguro que podríamos haber estado otras 3 horas más. ¡Los peques no se querían ir! Aún no me creo que estuviésemos tanto tiempo dentro y sobre todo, con los niños tan motivados…

Las espectaculares formaciones, aparte de dejarte con la boca abierta, hacen que la imaginación sea la protagonista de todo el recorrido. Para ir con niños es alucinante.

La entrada cuesta 4€ pero los menores de 7 años no pagan entrada. Hay opción de hacer visita guiada (por 1€ más) aunque nosotros no la cogimos e hicimos la visita a nuestro ritmo. Según nos comentaron la visita guiada era muy entretenida para los peques por las historias y curiosidades que se cuentan, pero a nosotros, el hacerlo por libre nos permitió pararnos el tiempo que queríamos con cada una de las formaciones y hacerles miles de fotos…¡Tremendamente divertido!. Depende por tanto de vuestras preferencias y organización familiar.

El recorrido consiste en una «gymkana» por las formaciones, cada una de las cuales se asemejan a algo…un animal, edificio, un lugar…desde animales como una tortuga, un elefante o unos osos, hasta unos imponentes barcos, un convento, o un mar de piedra. Eso y mucho más podréis encontrar allí.

Además, ya no solo es seguir el recorrido interpretado y ver como efectivamente se parece la formación a lo que se indica, sino que hay otra multitud de espectaculares formaciones no señalizadas a las que buscar parecido con algo. Y es aquí donde cada peque deja volar su imaginación…

En cada rincón podíamos escondernos, saltar, hacer fotos o correr alrededor…¡anda que no mola! Totalmente recomendable para ir con niños. Nos encantó y sorprendió muchísimo.

Algunas recomendaciones para ir con peques a La Ciudad Encantada:

- Calzado cómodo. Es un circuito fácil pero no esperéis un camino asfaltado. Un calzado bien cómodo tanto para vosotros como para los peques os hará a disfrutar más la visita.

- Agua y algo para picar. Como se trata de un recorrido largo (en el mejor de los casos 1,5 h), no olvidéis ambas cosas. Si es en verano el agua es imprescindible. Nosotros merendamos dentro de La Ciudad Encantada. Eso sí, respetad el entorno, no lo olvidéis.

- Gorras, no vienen mal para los tramos de sol en verano.

- Motivación inicial. Cuando le digáis a los peques que vais a visitar una Ciudad Encantada seguro que les gusta la idea. Habladles un poco sobre el lugar, que fue lo que ocurrió allí en el pasado y ponerlos en situación. Alucinarán viendo el tamaño de las formaciones. Y si le ponéis un poquitín de «cuento» al asunto sobre lo encantado del lugar, os los meteréis en el bolsillo seguro.

- Dejadle a vuestros peques el plano del recorrido. Que sean ellos los que marquen el camino. Al estar muy bien señalizado (las señales de color azul indican el camino de ida y las de color de rosa el de vuelta), les resultará muy fácil identificarlo e irán aún más motivados (a los míos, lo de encontrar una señal les vuelve locos)

- Mejor con mochila porta bebés, aunque como ya os he indicado antes, es posible llevar el carrito (salvo en determinados tramos que tendréis que cogerlo).

- Hay una explanada-parking justo enfrente de la entrada, así que no hay problema de aparcamiento. Y es gratuito.

- Durante el recorrido no hay cuarto de baño. Ni en el acceso tampoco.

- Frente al acceso de La Ciudad Encantada, y como continuación del parking, hay un hostal-restaurante donde podréis tomaros algo bien a la entrada o a la salida, descansar un poco, o hacer alguna de las comidas si se os ha echado el tiempo encima.

Os lo recomiendo para visitar con peques…¡no os la perdáis!

¡Que tengáis un gran miércoles!

¿Pensando en visitar la Serranía de Cuenca con niños?

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