Hace unos días hemos regresado de nuestras vacaciones de verano. Este año hemos desconectado dos semanas y el destino elegido ha sido Normandía, en Francia. Una maravillosa zona para descubrir en familia, tranquila, fresca, de paisajes verdes interminables y con grandes joyas por descubrir.
El destino en realidad, no lo elegimos “a iniciativa” nuestra. Ya sabéis que desde hace poco tiempo hemos comenzado a viajar intercambiando casa y tras nuestra primera experiencia en Berlín, nos animamos a seguir utilizando esta forma de alojamiento que tantos buenos momentos nos ha dado ya. Por eso, cuando hace unos meses recibimos la propuesta de Sophie, desde un pueblecito de Normadía para intercambiar este verano, pensamos…¿por qué no?.
Normandía era una zona a la que le teníamos ganas desde hace tiempo, nos resultaba muy accesible con los niños, y además, podíamos incluso ir en nuestro propio coche (si, ya sé que está lejos pero era otro reto a conseguir). Así, cuadramos fechas con Sophie, y antes de que nos hubiésemos dado cuenta, habíamos cerrado lo que sería nuestro segundo intercambio de casa. La familia de Sophie, con su peque de 5 años, se alojarían en nuestra casa durante 2 semanas en Agosto y nosotros nos alojaríamos en la suya de Normandía.
Como a raíz de nuestras experiencias, muchos me estáis preguntando acerca del sistema de intercambio de casa, en este post os cuento las impresiones de mi familia tras la experiencia en Normandía y más adelante os hablaré un poco sobre como funciona y de la plataforma con la que nosotros lo hemos realizado en las dos ocasiones: IntercambioCasas.com.
¿CÓMO HEMOS VIVIDO NOSOTROS EL INTERCAMBIO DE CASA?
Gracias al intercambio de casa con la familia de Sophie y al ahorro que nos ha supuesto HEMOS PODIDO ALARGAR LAS VACACIONES DURANTE 14 DÍAS, ALOJÁNDONOS DE FORMA GRATUITA. De otra forma, no hubiésemos podido estar viajando durante tanto tiempo. Nos hemos alojado durante dos semanas en un pueblo llamado Barentin, en la Alta Normandía, a tan solo 20 minutos de Rouen y 1,5 h de París.
Ha sido genial. Nuestra casa de intercambio era preciosa. Una amplia y luminosa casa de dos plantas, con una decoración muy bonita, totalmente equipada y con un jardín enorme, verde y lleno de juguetes para los niños (cama elástica incluida). Desde el momento que entramos por la puerta, nos sentimos cómodos y encantados de poder estar allí.
Nuestra familia de intercambio nos había dejado sobre la mesa del comedor, una buena botella de sidra normanda, unas galletas típicas, golosinas para los peques, así como una carta dándonos la bienvenida, una carpeta con información turística preparada por ellos con sus recomendaciones locales, y una caja con los libros de instrucciones de todos los electrodomésticos.
Además, habíamos quedado en que ambas nos dejaríamos la comida para el primer día de llegada, para no tener que salir corriendo al supermercado para comprar cosas. Así, unas pizzas, algo de fruta y de verdura, yogurs y queso nos estaba esperando en nuestro frigirífico de intercambio.
Los niños alucinaban al ir descubriendo poco a poco lo que sería nuestro hogar durante las dos semanas. Cada habitación les ocasionaba más asombro, descubrir los juguetes que podrían utilizar los hacía felices, y cuando vieron en jardín…se pusieron a saltar de alegría. Os aseguro que es una pasada llegar a una casa, donde los peques disponen de juguetes, y de las que ¡prácticamente no quieren salir!.
Teníamos mucho más de lo que necesitábamos para sentirnos cómodos. Teníamos mucho más de lo que necesitábamos para sentirnos como en casa: barbacoa, un precioso sofa y mesa en el jardín, huerto propio del que podíamos coger lo que deseábamos (vaya calabacines…)… Y por supuesto, una buena wifi que para nosotros es primordial (solemos viajar siempre con el ordenador a cuestas por motivos laborales).
¡Hasta hemos tenido mascota!. En nuestra estancia, hemos cuidado de un gato al que mis hijos querían adoptar desde el momento en que lo vieron. Nos ha hecho compañía y nos ha ayudado a sentirnos como en casa ya que no dudó ni un momento de nosotros y desde la primera noche se sentaba con nosotros en el sofá a ver la peli :).
Disfrutar de esta casa, nos ha permitido además, tomarnos las cosas con más tranquilidad. Disponíamos de 14 días y los hemos aprovechado de forma relajada. Sin necesidad de madrugones ni planes apretados. De hecho, ha habido días que incluso nos hemos quedado en casa, disfrutando de nosotros, jugando en el jardín y preparando nuestra barbacoa.
Además, como la zona donde nos hemos alojado no era nada turística, nos hemos sentido como auténticos habitantes de Barentin. Estar en una casa de verdad, era como vivir allí durante un corto tiempo y nos hemos entregado a seguir las indicaciones locales de nuestra familia de intercambio y de nuestros vecinos. Parques cercanos, compra en panaderías locales, supermercados próximos y paseos por pueblos que nunca jamás nos hubiésemos planteado visitar de no ser por viajar así.
Hemos hecho excursiones cercanas y lejanas. Nos hemos asombrado ante los acantilados de Étretat, paseado por pueblos preciosos como Rouen, Honfleur, Jumieges, Lyon la Foret o Cléres. Hemos descubierto qué es un Base de Loisiers y como disfrutan los franceses y sus familias en ellos. También nos hemos bañado en las playas existentes en el río Sena y hemos bajado y subido por el Puente de Normandía cual montaña rusa.
Nos hemos divertido andando por senderos de paisajes increíbles, y nos hemos asombrado ante la belleza de Mont Saint Michel y la magia de sus mareas.
Hemos comprado fresas, sidra, rábanos, calabacines y hasta patatas, de productores locales y hemos recibido lecciones de historia, asimilando la magnitud de la misma en lugares como las playas del desembarco. Además, hemos podido cumplir un sueño viajero de los peques, que era ver la Torre Eiffel.
Y mucho más…
En definitiva, ha sido un viaje muy especial para todos. Y os aseguro que sin el intercambio, no hubiésemos podido hacer muchas de estas cosas. Preparáos porque vais a tener en el blog Normandía para rato.
Por otro lado, la familia que se ha alojado en mi casa, ha estado igualmente disfrutando durante dos semanas de Córdoba y Andalucía. Para ser sincera, tenía un poco de miedo porque en Córdoba el verano puede ser duro por el calor, si no estás acostumbrado a ello. Les dejé un listado exhaustivo de piscinas y parques acuáticos existentes para que pudiesen combatir bien el calor, así como una buena tanda de recomendaciones.
Pero la comunicación con Sophie ha sido prácticamente diaria y no han tenido ningún problema. Han conocido Córdoba y han visitado un montón de lugares en Andalucía como Sevilla, Granada, Ronda, Marbella y playas diversas.
Están muy contentos de su paso por Córdoba y Andalucía, y al igual que nosotros, ya están pensando cual será su próximo destino de intercambio para el próximo año.
¿Cuál será el nuestro? ¡No lo sabemos! Quizás recibamos alguna propuesta de intercambio de casa que no podamos rechazar, o quizás consigamos el destino que busquemos, pero sea como sea…¡estamos deseando empezar a prepararlo!
Mientras…preciosa Normandía…
Tiene que ser una experiencia maravillosa. Nosotros querríamos probar alguna vez, es fantástico como lo cuentas, gracias por la información y espero que sigais disfrutando de cosas como esta y que nos las cuentes claro!!
Pues si te apetece probar estoy a tu disposición para todas las dudas que puedan surgirte. En cualquier caso, y más adelante, os contaré como funciona la plataforma que utilizo y como es el previo hasta que se realiza el intercambio. ¡Para nosotros está siendo todo un gran descubrimiento!. Un saludo y gracias por pasar por aquí!
Que pasada de viaje! Estaré atenta a esto del intercambio de casa para pasar vacaciones porque parece una estupenda opción
Ha sido un viaje muy especial para nosotros y lo hemos disfrutado al máximo. Volvemos con las pilas cargadas a tope! Gracias Mariló por pasar por aquí.
Ainsssss, qué envidia!!! Me està costando convencer a mi marido. El es un poco desconfiado por naturaleza y cuando ve las casas de intercambio dice q eso es imposible, que le da miedo llegar allí y q la casa no exista…jejeje. y el idioma ( en eso tiene razón) que nosotros no controlamos inglés, ni francés,… Bueno a ver si alguna vez consigo hacerlo. Disfrutad mucho família!!!!
Si no lo habeis hecho nunca es normal que haya cierto recelo. Para mi, lo bueno es que antes de hacer el intercambio hablas mucho con la otra familia y dispones de toda la información que te permite estar tranquilo. Hasta la fecha, todas las familias con las que hemos tratado han sido muy respetuosas y enormemente amables. Nos hemos encontrado incluso regalitos de bienvenida y nos han dado un montón de información sobre las cosas que hacer allí. La verdad que la confianza, comunicación y respeto mutuo es la base de un intercambio exitoso. Estoy a vuestra disposición si tenéis dudas sobre nuestra experiencia. ¡Un saludo!
Qué experiencia!! La verdad es que muchas veces se me ha pasado por la cabeza, pero me da un poco de miedito, sobre todo por la gente que viene a tu casa… Deseando leer más de Normandía que le tengo muchas ganas!
¡Hola Mari Carmen! Nosotros llevamos dos intercambios: uno a Berlin el pasado mes de mayo y este a Normandía. Es una pasada, te lo aseguro, no solo el ahorro que supone sino la experiencia en sí misma. Si te animas en algún momento y quieres conocer mejor mi experiencia previamente, no dudes en preguntarme!!!! De todas formas te escribo!
Wau me interesa mucho como va lo del intercambio!!! Nosotros este año es la primera vez que hemos salido de España en coche, llevamos 4.500 km. Dos peques de 8 años y un bebe y la experiencia es formidable, enriquecedora y vamos por el ultimo alojamiento y vamos pensando donde iremos al año que viene.
¡Pues estoy a tu disposición para lo que necesites! 😉 Nosotros hemos hecho una buena tunda de km este verano también jeje Para mí, viajar con los peques es de lo más gratificante que se puede hacer así que enhorabuena por esos 4500 km y a por muchos más!!!! 🙂 Gracias por pasar por aquí!
Que experiencia mas bonita! Yo tambien estoy intentando convencer a mi marido de hacer en un futuro un intercambio… Pero tengo alguna duda: cuando llegas al alojamiento, tienes armarios libres para colocar la ropa? Es que yo no sabria que hacer con mi ropa para poder hacer hueco para los inquilinos! Y en la habitacion de las niñas me pasaria igual…
Normalmente te encuentras un hueco en el armario (no es necesario el armario al completo), basta con un espacio para que los que vienen puedan colocar su ropa. Si puedes dejarles algún cajón mejor que mejor. En mi caso, libero un trozo de mi armario, guardando algo de ropa en el canapé que tengo bajo la cama jeje. Yo me he encontrado lo mismo, algún espacio para guardar mi ropa el tiempo que estoy allí. No es necesario mucho más! Todo es más fácil de lo que parece, no te creas!
Muchas gracias por compartir vuestras experiencias.
Lo mejor de todo, que nuestros hijos crezcan con el espíritu aventurero de sus padres.
Gracias a tí por pasar por aquí. Ojalá pueda transmitirle a mis hijos la curiosidad por el mundo y las ganas de viajar…le aportarán mucho valor! Un saludo!
Me ha encantado el post. La idea de poder intercambiar casas o apartamentos cada vez me atrae más.
Pues estoy a tu disposición si tienes alguna duda sobre mi experiencia 😉