HACE DOS AÑOS, EN MAYO DE 2014, conocí a Roser en Tarragona, que me habló del intercambio de casas. Hablaba destilando alegría, y trasmitía una emoción especial contando sus grandes experiencias y vivencias en diferentes lugares y con grandes personas que había ido conociendo a lo largo de sus diecimuchos intercambios de casa.
Aunque para mí no era la primera vez que oía sobre ello, sí era la primera que conocía a alguien que lo hubiese hecho. Y no puedo negar que tras escucharla, me picó la curiosidad.
HOY, MAYO DE 2016, justo 2 años después y en la misma fecha en la que conocí a aquella magnífica mujer, la ciudad de BERLÍN me está esperando para descubrirla en familia y para vivir mi primer intercambio de casa.
Y es que a mediados de esta semana nos encontraremos en tierras alemanas, cruzando las puertas de una casa que una familia (des-conocida) nos ha abierto para que nos alojemos en ella, mientras ellos, con sus dos peques estarán entrando por las puertas de la nuestra.
Quien me lo hubiese dicho…
Si hace dos años me hubiesen dicho…
- Que vamos a disfrutar de 6 días en Berlín, alojados en 1 piso con todo lo que necesitamos, como si estuviésemos en casa: conexión a Internet, cocina, lavadora, juguetes para los peques…a coste 0.
- Que habría alguien esperándonos a nuestra llegada a Berlin, una de las familias vecinas, que gentilmente se ofrece a darnos las llaves del piso y a recibirnos, así como a atendernos en cualquier cosa que necesitemos o por supuesto en alguna urgencia.
- Que tenemos a nuestra disposición bicicletas para descubrir la ciudad a dos ruedas. Nuestra familia de intercambio nos deja sus bicis para que podamos movernos por Berlín…también a coste 0.
- Que me llevo desde Córdoba una guía hecha por nuestra familia de intercambio con los supermercados del barrio donde me voy a alojar, así como los restaurantes más chulos y otros lugares que a ellos más les gustan. Sin olvidar además, un listado de los contactos y detalles de los servicios de urgencia (pediátrica) más cercanos a mi piso también indicado por ellos.
- Que acabo de hacer una super guía de mi casa, contando todos los detalles de funcionamiento y truquillos a aplicar para mi familia de intercambio (incluida la persiana que se atranca, el uso del brasero, y el grifo que gotea).
- Que mis peques ya han ordenado varias veces su cuarto de los juguetes y su biblioteca de casa, y han hecho hueco en su armario para que los “amigos” que van a venir a alojarse en casa puedan encontrar fácilmente todo (y es curioso que ellos emplean la palabra “amigos” aún sin conocerlos. Eso sí, el unicornio rosa, la tablet, el cuaderno de pegatinas y el libro del 4º viaje de Gerónimo Stilton se lo van a llevar (¡no van a dejarles todo, todo!).
- Que he recopilado diversa información turística de mi ciudad, impresos varios mapas desde Google Maps y señalado en ellos también los supermercados más próximos, los puestos de caracoles que no se pueden perder, la pizzería justo debajo de mi casa y que tiene las mejores pizzas de toda Córdoba, algunos parques infantiles incluido el parque donde vamos a jugar con los peques, el top 10 de cosas a visitar, nuestras tabernas y restaurantes favoritos, y mi lugar preferido fuera de los circuitos turísticos para disfrutar de unas impresionantes vistas de Córdoba.
- Que he desempaquetado mi trona para que mi familia de intercambio pueda utilizarla con su peque de 9 meses, y que ya tengo pensado lo que les voy a dejar de regalo de bienvenida en casa (un plato de salmorejo les cae fijo).
- Que todo esto ha ocurrido tras 1 año de pertenecer a la comunidad de IntercambioCasas.com (versión en castellano de HomeExchange.com…sí, la misma que la de la peli The Holiday).
- Que desde hace 1 año, no solo estoy registrada en el portal, sino que también he disfrutado de ser una (muy pequeña) parte de su equipo (y esto si que no me lo hubiese creído), lo que me ha permitido conocer increíbles experiencias y testimonios de grandes viajeros que recorren y descubren el mundo intercambiando su casa. Y que finalmente, me ha llevado a mi a querer vivir tales experiencias.
- Que en ese año he recibido propuestas de intercambio de El Puerto de Santa María (Cádiz), Madrid, Cantabria, Mataró (Barcelona), Florida, Dinamarca, Quebec, Sur de Francia, Fermo (Norte de Italia), París, y Alemania. La mayoría las tuvimos que rechazar por motivos de fecha, y aceptamos un par de ellas que finalmente no salieron. Cada una de las ofertas era una agradable sorpresa y un suave cosquilleo que significaba…¿y si nos vamos?
- Que el destino nos ha sorprendido también regalándonos el destino de Berlín, al que le teníamos muchas ganas y si todo sale bien, en verano realizaremos nuestro segundo intercambio: Normandía (Francia). Dos destinos que no nos habíamos planteado para este año, ¡pero que vamos a descubrir! (con lo que nos ahorramos en alojamiento podemos hacer los dos viajes).
- Que a día de hoy, hay dos peques y dos papás que están nerviositos pensando en qué ocurrirá en los próximos días y si todo efectivamente saldrá bien. Nos quedan grandes emociones por descubrir.
Si nos llegan a decir todo esto hace 2 años, probablemente no me lo hubiese creído…bueno ¿o sí?
Berlín…allá vamos
Queridos “amigos”…bienvenidos a Córdoba y bienvenidos a casa
Si queréis más información sobre la web IntercambioCasas.com, no dudéis en pinchar en el banner que tenéis a continuación o en el que encontraréis en la columna de la derecha del blog (si os registráis en algún momento a través de él, yo salgo beneficiada).
Qué experiencia más interesante!
Cuando volváis, nos cuentas, vale?
Que disfrutéis!!!
¡Muchas gracias! Sí, ya os contaré….Estamos un poco nerviosos, la verdad! Un saludo y mil gracias por pasar por aquí!
Me encanta!! 😀 Todavía recuerdo ese día de mayo de hace un par de años cuando me dijiste “me atrae un montón la idea pero yo vivo en córdoba y nadie querrá intercambiar conmigo”… y mírate, haciendo las maletas para belín!! 😀 😀 😀 oleee! un abrazo fuerte y a disfrutar de ese cosquilleo del 1er intercambio ^^